ENFOQUE

Prevén discurso de Danilo despeje estado de ansiedad

EL MANDATARIO APARECE BIEN VALORADO POR EDITORIALES DE LOS MEDIOS

Al decidir que esta noche hablará al país sobre los logros de sus primeros 100 días en el gobierno, el presidente Medina parece apartarse de la política del silencio que ha mantenido desde la toma de posesión. Su discurso quizá contribuya a calmar la ansiedad producida por las manifestaciones de “indignados”.

Medina no tiene mucho que ver con las manifestaciones porque las mismas alegan lucha contra la impunidad y el déficit fiscal de 187 millones de pesos dejados por el anterior gobierno, lo que de una forma u otra afecta la realidad de su partido el PLD y del ex presidente Fernández, quien sí se ha defendido.

Quizás Medina y sus estrategas creyeron que el silencio era la mejor respuesta a la situación mientras hacía propuestas concretas para cumplir su programa de gobierno. Al agotar los 100 días pudo haberle alentado la gran cantidad de endosos de los medios de comunicación y personalidades públicas.

Las manifestaciones de los jóvenes “indignados” dominicanos que en las pasadas dos semanas protagonizaron mítines, piquetes y un simulacro de juicio pantomímico con discursos, contribuyó a motivar manifestaciones de rechazo, y apoyo al ex presidente Fernández, mientras el régimen mantenía su silencio.

Los periodistas, acusados unos de favorecer  por amistad o viejos patrocinios al anterior gobierno, y otros de estar vinculados a planes de la oposición, no tienen al parecer un espacio intermedio que mida sin comprometerse la realidad política y demandas contra la supuesta impunidad.

El país dividido

Medina hablará a un país que parece dividido entre los ataques tempestuosos al doctor Fernández y la defensa de camaradas, dolientes, amigos y beneficiarios de su régimen que han salido al ruedo mientras muchos ciudadanos, al menos por ahora, creen que hubo un abultado déficit fiscal.

En un discurso formal por televisión y radio, Fernández defendió su reputación y la del régimen pasado al afirmar que el déficit se produjo por la caída de las recaudaciones, el aumento del subsidio eléctrico, el alza de las inversiones y el financiamiento del deficitario Banco Central.

Los adversarios de Fernández dicen que hubo déficit y fraude fiscal por un monto de más de 187 mil millones. El economista Andy Dauhajre, en un artículo el pasado martes, aseguró que ciertamente, como afirmara el ex presidente, el déficit fiscal se debe en parte a la baja presión tributaria de 13%.

“Habríamos tenido fraude fiscal si el déficit de RD$187,000 millones no tuviese contrapartidas de gasto público que lo avalaran, y en consecuencia, esos dineros hubiesen ido a parar a sacos de los supuestos ladrones”, apunta el economista.

Manipulan artículo

El embajador dominicano en Washington D.C., y ex director de diarios, Aníbal de Castro, declaró en carta a LISTÍN DIARIO que una reseña de la publicación de la revista británica The Economist sobre República Dominicana, fue manipulada de forma viciosa por algunos medios locales.

Tras analizar el comentario de la revista y la acusación de que el gobierno de Fernández provocó el déficit por vía de la corrupción, el diplomático cita a The Economist en su aserto de que “no hay evidencia de que él estuviese directamente envuelto en la corrupción”.

A raíz de la manifestación del domingo 12 del corriente mes en el parque Independencia contra el doctor Fernández, un grupo de ex combatientes constitucionalistas, notoriamente entre ellos el héroe cubano-dominicano, Delio Gómez Ochoa, le ofreció su respaldo público.

Gómez Ochoa fue insultado después en programas de radio y televisión opositores lo que motivó un artículo del veterano periodista, Premio de Periodismo del Grupo Corripio, Santiago Estrella Veloz, en el cual aconsejó a los jóvenes no querer “llevarse el mundo por delante”.

Tras repasar la historia de Ochoa, Estrella Veloz sugiere a los contestatarios de hoy empaparse más de nuestros asuntos históricos para no convertirse en “carne cañón” de políticos que nunca dan la cara en las protestas públicas, sino que lo hacen a través de la prensa para simplemente mantenerse en un figureo estéril.

Medina en 100 días

Con su silencio como respuesta al griterío de la calle, que recae sobre todo contra su antecesor, Medina aparece bien valorado en los editoriales de medios de comunicación que no sufren la calentura del momento, y en los resultados de la encuesta Penn and Schoen-La Lupa.

De acuerdo al titular de La Lupa solo 34% aprueba la gestión de Medina, pero cuando se analizan los detalles de la nota servida de su última edición, el 47% dice que su manejo es “regular”, y solamente un 17% lo aprecia “mal”. Los amigos de Medina suman 47% a 34% para alegar que su desempeño pasa al 81%, al interpretar el habla coloquial de los dominicanos sobre lo que significa “regular”.

Medina se beneficia en la encuesta referida de que los encuestados lo valoran positivamente con un 54%, en tanto que la vicepresidenta, Margarita Cedeño de Fernández alcanza el 60%, siempre la mejor valorada entre las personalidades políticas.

El doctor Fernández queda en esa encuesta con un 31% de aprobación y un 53% de rechazo y, sorprendentemente el ex candidato del PRD, Hipólito Mejía, con 31% y 52% de rechazo, peor valor que Guillermo Moreno, de Alianza País, cuyo partido perdió la personería jurídica. La encuesta no midió el rango de Miguel Vargas Maldonado, el otro líder del PRD.

En el portafolio de Medina se destacan las múltiples medidas adoptadas desde educación, agricultura, salubridad, apoyo a las medianas empresas hasta recortes de su administración, así como detalles en la puntualidad y la cortesía con que trata a los pobladores en las visitas imprevistas que realiza.

A Medina le perjudica denuncias rezagadas de investigaciones periodísticas sobre funcionarios del régimen anterior y que están saliendo ahora. Uno de los comentarios de la prensa escrita dijo que quizá en febrero, una fecha de acostumbrados cambios, el Presidente pudiera desprenderse de los que han sido denunciados por actos de corrupción.

Según apreciación del reconocido economista, Eduardo García Michel,  lo peor es que el pesimismo cope la vida del país. Sugiere ver la situación con optimismo cauteloso y advierte que todo depende de cómo se formule el nuevo presupuesto previsto a ser sometido al Congreso  en breve.